Si bien 2024 no fue un mal año para Europa en términos de rendimiento escolar, la Bolsa de París enfrentó grandes desafíos. Mientras índices como el EuroStoxx 600 registraron una ligera caída del 6,5%, otras bolsas europeas como el Ibex 35 y la Bolsa de Milán registraron subidas del 16% y el 13% respectivamente. Al contrario: la Bolsa de París se encuentra en terreno negativo con pérdidas del 2%.
Comportamiento del mercado francés
Las acciones de las empresas de lujo, históricamente un pilar del mercado francés, subieron un 9% hasta finales de agosto. Sin embargo, la situación comenzó a deteriorarse a plena luz del día cuando tres problemas con la llave quirúrgica impactaron negativamente en el índice. La dependencia del sector del lujo, que forma parte del índice, es particularmente preocupante dada la demanda en China. Empresas de renombre como LVMH y Hermès, que sólo aportaron estabilidad, se encuentran ahora bajo una presión importante debido a la desaceleración económica en su principal mercado.
Impacto del sector del lujo
Es notable la influencia del sector del lujo en la Bolsa de París; LVMH, por ejemplo, representa el 10% del índice. Sin embargo, la respuesta de la demanda, particularmente en China, ha llevado a una reevaluación de las expectativas de crecimiento. HSBC ha reducido sus estimaciones y espera que no haya incrementos de dos dígitos en los próximos trimestres.
Crisis en el sector industrial
Francia, junto con Alemania, vive una crisis en su sector industrial. La situación en Stellantis, el grupo automovilístico detrás de marcas como Renault y Chrysler, refleja los problemas de la industria. Con una cuota del 27% de las presentaciones, la empresa se ha enfrentado a grandes retos gracias a su amplia experiencia y capacidad de realizar consultas.
Los últimos Índices de Gestión de Compras (PMI) también indican una caída de la actividad manufacturera, con un índice de 44,5 puntos, lo que indica una profunda crisis en el sector.
Retos para el sector financiero
Aunque el sector financiero francés es uno de los más fuertes de Europa, también enfrenta sus propios problemas. Aunque los grandes bancos como BNP Paribas y Crédit Agricole son grandes actores, su peso en el índice global es relativamente pequeño, lo que limita su impacto. Además, los beneficios de los bancos franceses han disminuido en comparación con otros bancos europeos.
El déficit estructural de Francia y su impacto en el público son preocupantes. Cuando los mercados empezaron a pagar más por la deuda francesa que por la española, surgió un escenario inusual que reflejaba la fragilidad de la situación económica de Francia.
La Bolsa de París atraviesa un período difícil marcado por el declive del sector del lujo, la crisis industrial y los desafíos del entorno financiero. Incluso si los problemas estructurales persisten, la situación económica de Francia podría seguir deteriorándose. Los inversores deben estar atentos a las decisiones políticas futuras y su impacto en la economía y la evolución del mercado en el contexto de incertidumbre global.
