Esta semana, los últimos datos de inflación están acaparando la atención de los inversores, ya que el índice de precios al consumo (IPC) cayó un 2,9%, un descenso anual del 0,2%. Aunque los datos coinciden con las expectativas del mercado, las reacciones fueron limitadas y los movimientos en los mercados no fueron claros. Los analistas señalan que la Reserva Federal ha controlado la inflación y ahora la atención se centra en el mercado laboral.
En su última reunión, la Reserva Federal aseguró que los empleados están jugando un papel cada vez más importante en sus decisiones. Su comunicación contiene un nuevo mensaje: la atención se centrará en cuestiones relacionadas con ambos aspectos de su mandato, incluida la estabilidad de precios y el empleo. Este cambio sugiere que la Reserva Federal ha aliviado sus preocupaciones sobre la inflación y ahora está más en sintonía con las condiciones del mercado laboral.
Con la próxima reunión de la Reserva Federal prevista para septiembre, se prepara para evaluar cómo los datos de empleo influirán en sus decisiones sobre operaciones clave. Allison Boxer, economista de Pimco, informó que la Reserva Federal tiene mucha confianza en que la inflación se mantendrá dentro de un rango aceptable y que los riesgos asociados con sus dos mandatos están más equilibrados.
Analistas de diversas instituciones como Morgan Stanley y Commerzbank coincidieron en que el foco de la Reserva Federal se ha desplazado hacia los empresarios, reflejando una tendencia que se ha manifestado a lo largo del tiempo. Sin embargo, a pesar del aparente control de la inflación, persisten las preocupaciones, particularmente en relación con los precios de los alimentos y el costo de la vida.
La Reserva Federal ha expresado su preocupación por la inflación de los alimentos, que representa el 35% del IPC. Aunque los aumentos recientes han sido modestos, los últimos datos mostraron un aumento sorpresa del 0,4%, lo que podría indicar una ruptura en la tendencia bajista. Los expertos de Capital Economics e ING advierten que la presión sobre el coste de la vida continuará y podría complicar las perspectivas de la Reserva Federal en su próxima reunión.
Si bien la inflación parece estar bajo control, el objetivo de la Reserva Federal es destruir el mercado laboral y el costo de vida, lo que plantea nuevos desafíos a su política monetaria.